Se han observado diferentes procesos sindicales que se han caracterizado por la baja participación
De acuerdo con especialistas en la materia, la “no sindicalización” abre la oportunidad para que las empresas impulsen mejores condiciones laborales para los trabajadores. Pues la empresa y el trabajador pueden convenir un alza salarial más elevada que la que se ofrece a través del sindicato, en tanto el trabajador decida no afiliarse a alguna organización gremial.
Ello lejos de debilitar a los sindicatos, promueve una sindicalización real en el país, pues combate los cacicazgos y el manipulación política, en tanto que los trabajadores cuentan con la oportunidad de afiliarse o no afiliarse a un sindicato buscando obtener los mayores beneficios para ellos y sus familias.
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Lo cierto es que en el país, el ambiente sindical atraviesa por uno de los momentos más álgidos de las últimas décadas. Por lo que el debate se ha concentrado en cuáles son las mejores prácticas sindicales en México, dejando de lado una opción que en la práctica va tomando fuerza: la “no sindicalización”.
Y es que, durante este año, se han observado diferentes procesos sindicales que se han caracterizado por la baja participación, el descontento con las condiciones laborales y el hartazgos hacia los liderazgos charros.
Por lo que esta vía, “la no sindicalización”, ofrece oportunidades en dos vías: el establecimiento de una mejor relación entre la empresa y los trabajadores; así como, una afiliación libre basada en las mejores prácticas sindicales.
Fuente: Redacción
