El dedos, es el sobrenombre de Israel Cervantes, un ex trabajador de la planta de General Motors Silao, a quien sus compañeros recuerdan como un tipo flojo, que de manera constante introducía los dedos en la línea de producción para causarse accidentes y obtener incapacidades. De ahí le viene el apodo, pues prefirió mutilar sus dedos para poder ausentarse de la planta. A decir de sus compañeros, era mejor que tomara estas incapacidades, ya que era común en él presentarse bajo el influjo de algún estupefaciente, particularmente solventes.

Flojo, violento, acosador, son los adjetivos más comunes con los que describen sus compañeros a Cervantes, principal vocero de la organización Generando Movimiento, la cual cobró relevancia en el contexto del proceso de consulta para la legitimación de las Condiciones Generales de Trabajo de General Motors Silao. De pronto, pasó de ser un trabajador mediocre y violento y se convirtió en el paladín de la democratización sindical.

¿Cómo es posible que un trabajador con estas características cobrara relevancia?

Todo inició tras su despido de la planta, ya que, tras los diferentes señalamientos por parte de compañeros, las autoridades decidieron aplicarle una prueba anti dopaje, a la cual por supuesto dio positivo. Tras ser despedido, “el dedos” demandó su reinstalación ante la Junta Local de Conciliación y Arbitraje. Al mismo tiempo, buscó la asesoría de Irma Gómez Contreras, en ese momento Confederación Nacional de Trabajadores y Empleados de México (CATEM) en Guanajuato. Luego de esto, buscó acercarse con el líder minero, Napoleón Gómez Urrutia.

Fue el actual senador por Morena quien terminó por patrocinar su movimiento, además de brindarle recursos económicos para su manutención y la promoción de su organización, lo conectó con una red de líderes y organizaciones sindicales mundiales, quienes le brindan recursos de manera constante y se han encargado de legitimarlo a través de eventos a su favor. Son estos mismos sindicatos los que presionan a los gobiernos de Estados Unidos y Canadá para que intervengan en los procesos internos de nuestro país.

Pero a “El dedos” no le importa traicionar a sus compañeros y a su país con tal de conseguir sus objetivos personales. Para muestra, un botón, ya que en una entrevista al medio Guanajuato 24/7 arremetió contra el Presidente de la República y contra la Secretaria del Trabajo, Luisa María Alcalde, a quien llamó maniquí. ¿Confiarán los trabajadores de General Motors Silao su futuro a un tipo sin escrúpulos como Israel Cervantes?

Fuente: Redacción