
La producción de caña de azúcar en México enfrenta serios desafíos en la presente zafra, ocasionados por lluvias intensas y la aparición de plagas. En la Ribera del Río Hondo, las condiciones climáticas adversas han resultado en una reducción de 150 mil toneladas en la molienda de caña, mientras que en Casasano, la cosecha se ha visto retrasada por las recientes lluvias, aunque las siembras no han sido gravemente afectadas.
Líderes del sector han instado al gobierno a proporcionar apoyos para minimizar las pérdidas. Según reporta Por Esto, Evaristo Gómez, líder de la ULPCA en la Ribera del Río Hondo, ha señalado que solo se han podido procesar 350 mil toneladas de caña debido a las adversidades. Además, el hongo Fusarium ha impactado unas 12 mil hectáreas, disminuyendo la concentración de sacarosa y repercutiendo en la calidad del Kilo de Azúcar Recuperables Base Estándar (Karbe), cuyo precio actual es de 74 pesos.
En una reunión con Sedarpe y Sader, los líderes cañeros expresaron la gravedad de la situación y la necesidad de apoyos gubernamentales. Gómez añadió que se han programado paquetes de insumos y tecnología para mitigar los efectos negativos. Gutiérrez, líder de la CNPR, mencionó que localidades en la zona norte de la Ribera del Río Hondo han experimentado pérdidas que oscilan entre 250 y 300 mil toneladas.
Por otro lado, la situación en Morelos es más alentadora. Miguel Barranco, presidente de la ULPCA de Casasano, comentó que la reciente lluvia ha retrasado la cosecha, pero no ha causado daños significativos en las siembras. Actualmente, la zafra tiene un avance del 35 al 40 por ciento de caña industrializada, y el Karbe superó el registro del año anterior. Los productores siguen trabajando para atender las afectaciones y asegurar la viabilidad del sector.