Se culpa a las Afores de generar enormes ganancias a costillas del ahorro de los trabajadores y dañar con ello su expectativa de pensión, pero hay otra realidad que no conoces.
Las Afores que administran e invierten los recursos para tu retiro se han beneficiado en los últimos años, pero no necesariamente la buena racha se reflejará en la pensión que obtengas al retirarte.
Las Administradoras de Fondos de Ahorro para el Retiro (Afores)manejan en los mercados una enorme y creciente masa monetaria que les ha dejado utilidades históricas. El año pasado, las Afores obtuvieron beneficios por un total de 72 mil 406.6 millones de pesos, lo que significó un incremento de 10.92 por ciento respecto a 2016 cuando ganaron 65 mil 277.86 millones de pesos. Año con año sus beneficios o utilidades no tienen precedente.
Lo anterior se justifica al observar el monto que tienen en administración las Afores, recursos propiedad de los trabajadores y que, de acuerdo con la ley, son invertidos en los mercados financieros y en proyectos de infraestructura por parte de las administradoras mediante sus brazos financieros, las Sociedades de Inversión Especializada en Fondos para el Retiro (Siefores).
Cifras de la Comisión Nacional del Sistema de Ahorro para el Retiro (Consar), órgano regulador del sistema de pensiones, señalan que al cierre de julio pasado los recursos en el Sistema de Ahorro para el Retiro (SAR) ascendieron a 3.368 billones de pesos, lo que equivale a 15 por ciento de PIB de México.
Durante la presente administración estos activos han crecido poco más de 1.5 billones de pesos y vale la pena señalar que, de este monto total, alrededor de 670 mil millones de pesos correspondieron a rendimientos netos de comisiones generados por las Afores, es decir, a favor de los trabajadores.
Esta masa monetaria, producto del ahorro de los trabajadores, representa la fuente de financiamiento interno más importante del país, solo por detrás del ahorro bancario, hay alrededor de 1.2 billones de pesos de ahorro de los trabajadores invertidos en empresas y proyectos productivos del país.
Así, esta primera faceta del ahorro para el retiro parece ser muy favorable, con una auténtica montaña de dinero que genera a las Afores enormes utilidades.
Bajas pensiones
Si en el SAR los recursos que administran las Afores representan una enorme masa monetaria, entonces la pregunta es: ¿Por qué la expectativa de pensión es tan baja para los trabajadores mexicanos?
La respuesta es inmediata, tenemos una tasa de aportación a nuestro fondo de ahorro para el retiro determinada hace más de 60 años por las autoridades de entonces, cuando el mundo era otro.
México tiene, de hecho, uno de los porcentajes más bajos del mundo, con apenas 6.5 por ciento para quienes cotizan en el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) y 11.5 por ciento para aquellos trabajadores que lo hacen en el Instituto de Seguridad Social de los Trabajadores del Estado (ISSSTE).
Estudios recientes de la propia Consar señalan que un trabajador mexicano cuyo salario está en el promedio de 8 mil pesos mensuales y cuenta con seguridad social, aporta solo 3.2 pesos diarios a su cuenta de ahorro para el retiro, es decir, mil 168 pesos al año, cifra que, multiplicada por 40 años en un escenario de retiro laboral, representa un monto de 46 mil 720 pesos, aproximadamente 6 meses de su sueldo anual, una cifra muy baja que no le servirá de nada en la vejez.
La pensión actual de un trabajador mexicano y la expectativa de la misma es tan baja porque corresponde con su nivel de aportación, la mala noticia es que no se observa una solución de corto plazopara este problema toda vez que se requieren cambios constitucionales para incrementar la tasa de aportación de los trabajadores a su fondo de ahorro para el retiro. Pero, sobre todo, se sacrifica popularidad y eso es algo muy difícil para los políticos de este país.
Es un hecho que en el sistema de pensiones tenemos dos realidades que son claramente opuestas por más que existan voces que intenten culpar a una de lo que pasa en la otra. Por un lado, las Afores no hacen otra cosa más que invertir, eficientemente, los recursos crecientes de los trabajadores, con lo que generan jugosos beneficios, pero siempre al amparo de la ley, al menos hasta donde se sabe.
Sin embargo, la otra realidad señala que las pensiones de los trabajadores son muy bajas (se calcula que la tasa promedio de reemplazo, es decir el porcentaje de salario que recibirá el trabajador al momento del retiro, se ubica en 35%), la enorme masa monetaria no alcanza para garantizar pensiones de primer mundo (equivalentes a 80% del salario), por increíble que parezca, esta montaña de dinero que administran las Afores debería ser mucho mayor.