En el marco de la discusión de la reforma al Poder Judicial, trabajadores del Consejo de la Judicatura Federal se preparan para orquestar un paro laboral el próximo 15 de agosto, si esta no respeta ciertas garantías a los trabajadores.
De acuerdo con el periodista Mario Maldonado, quien este viernes escribe su columna en El Universal, los promotores de la protesta desean preservar sus sueldos y prestaciones, pues la reforma enviada por el presidente Andrés Manuel López Obrador (AMLO) es muy clara en ese sentido y va por el recorte de salarios de jueces, magistrados y ministros, así como por la mayoría de las prestaciones que actualmente perciben.
Trabajadores del organismo encabezado por la presidenta de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN), Norma Piña, amenazan con “apagar” el Sistema Integral de Seguimiento de Expedientes (SISE), que de acuerdo con el columnista, se trata de un programa automatizado de captura y reporte de datos estadísticos sobre el movimiento de asuntos de los órganos jurisdiccionales del Poder Judicial de la Federación.
Explica que si el SISE se apaga, nadie podrá trabajar, ni siquiera en los asuntos urgentes del Poder Judicial, además de que planean el cierre de todos los edificios, sedes y juzgados del PJF.
Según Maldonado, algunos ministros de la SCJN evalúan presentar su renuncia para cuando menos rescatar su haber de retiro y conservar el monto de sus pensiones y prestaciones con la actual ley, sin embargo, es algo que no pueden hacer por sí solos, ya que el presidente tiene que aceptarla y posteriormente debe ser aprobado por el Senado de la República.
Y eso, dice, el columnista, es un tema que le tiene sin cuidado a López Obrador “pues de todos modos no piensa aceptar la renuncia de ninguno hasta que se apruebe su reforma y las bajas de los ministros y ministras se lleven a cabo conforme a la que marcan las nuevas reglas, es decir, sin grandes prestaciones ni nada parecido al haber de retiro”.
El entorno en la SCJN y en la CJF “está que arde”, apunta Maldonado, ya que el mandatario no piensa ceder en la reforma enviada, y la ministra presidenta Norma Piña se quedó sin interlocución tanto con López Obrador con el Poder Legislativo.
“La crisis actual y la sacudida por venir han puesto a la presidenta de la Corte y a los ministros a elaborar con urgencia una nueva propuesta de reforma, la cual no se ve tampoco cómo pueda ser tomada en cuenta. El diálogo con los legisladores fluye a cuentagotas y más con la decisión de la Segob y el TEPJF de llevar a juicio político y denunciar penalmente al juez Rodrigo de la Peza, muy cercano a Norma Piña”.
Maldonado resalta que Norma Piña también dinamitó la relación con quien será la secretaria de Gobernación, Rosa Icela Rodríguez, actualmente secretaria de Seguridad, pues ambas acordaron armar un proyecto de reforma a la Guardia Nacional para otorgarle el mandato a la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) y la ministra no lo respetó.
“En fin que es una relación (otra) que está más que rota”, añade el periodista.
Fuente: Polemón
