La Casa Blanca propuso una partida de 45 millones de dólares a una oficina en México para supervisar la implementación de las regulaciones laborales del Tratado entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC).

Este presupuesto se ejercería, de ser aprobado por la Cámara de Representantes para el ejercicio fiscal de 2025, que comienza el 1 de octubre de 2024 y finaliza el 30 de septiembre de 2025.

La Representación Comercial de la Casa Blanca (USTR) de Estados Unidos ha destacado constantemente el Mecanismo de Respuesta Rápida del T-MEC, al cual promueve como uno de los principales logros de su país en ese tratado comercial, vigente desde julio de 2020.

El T-MEC incluye un anexo relativo a la implementación de la reforma laboral de México en relación con la negociación de contratos colectivos de trabajo.

En particular, el anexo obliga al gobierno mexicano a incluir disposiciones en su legislación interna que aseguren que, previo al registro inicial de un contrato colectivo de trabajo o durante la revisión del mismo, mediante el voto individual y secreto de los trabajadores, el contrato cuente con el apoyo de la mayoría de los trabajadores.

Los casos de acción o inacción sostenida o recurrente en la aplicación de la legislación laboral por parte un gobierno, que afectan al comercio y la inversión, se sujetarán al mecanismo de solución de controversias del Tratado.

El presupuesto planteado para el ejercicio fiscal de 2025 incorpora un aumento de 45 millones de dólares para la Oficina de Asuntos Laborales Internacionales para permitirle continuar con la asistencia técnica específica de México en apoyo de la implementación en curso del T-MEC, mediante el avance de las protecciones laborales, la mejora de las condiciones laborales, la estabilización de las relaciones laborales y el aumento de la conciencia y el compromiso públicos.

Cada Parte en el T-MEC adquiere el compromiso de establecer en su legislación laboral el reconocimiento y respeto de los derechos fundamentales reconocidos al amparo de la Organización Internacional del Trabajo (OIT), así como la obligación de hacerlos cumplir:

Entre estos derechos destaca: la Libertad de asociación y el derecho efectivo a la negociación colectiva; eliminación de todas las formas de trabajo forzoso y obligatorio; eliminación efectiva del trabajo infantil; eliminación de la discriminación en el trabajo y ocupación.

Los recursos

La legislación de implementación del T-MEC incluyó 210 millones de dólares para la Oficina de Asuntos Laborales Internacionales del Departamento de Trabajo para actividades de implementación del T-MEC.

De esta cantidad, 180 millones de dólares se utilizarían durante cuatro años para proyectos de asistencia técnica relacionados con el T-MEC y 30 millones durante ocho años para la capacidad de ILAB de monitorear el cumplimiento del T-MEC, incluidos los gastos necesarios de empleados adicionales de tiempo completo para el Comité Interagencial y cinco agregados laborales en México.

La Oficina de Asuntos Laborales Internacionales es la principal voz del gobierno de Estados Unidos en el fortalecimiento de los derechos y las voces de los trabajadores a nivel internacional.

El Departamento del Trabajo ha destinado a cinco Agregados Laborales en esta oficina, que trabajan en estrecha colaboración con el Representante Comercial Senior de la USTR, así como con funcionarios del Departamento de Estado en la Embajada de Estados Unidos en la Ciudad de México.

La Oficina de Asuntos Laborales Internacionales

• La Oficina de Asuntos Laborales Internacionales (ILAB) es la principal voz del gobierno de Estados Unidos en el fortalecimiento de los derechos y las voces de los trabajadores a nivel internacional.

• La legislación de implementación del T-MEC incluyó 210 millones de dólares para esta Oficina, perteneciente al Departamento de Trabajo, para actividades de implementación del T-MEC.

• El Departamento del Trabajo ha destinado a cinco Agregados Laborales en esta oficina, que trabajan en estrecha colaboración con el Representante Comercial Senior de la USTR, así como con funcionarios del Departamento de Estado en la Embajada de Estados Unidos en la Ciudad de México.