Estos gobiernos presentan un mayor nivel de preparación y adaptación ante los retos derivados de la pandemia, asegura Imco.
Las entidades del país más competitivas y, por ende, con un mayor nivel de preparación y adaptación ante los retos que se están presentando por la crisis económica y sanitaria derivada del Covid-19, son la Ciudad de México y Querétaro, reveló el Instituto Mexicano para la Competitividad (Imco).
En videoconferencia de prensa, el director general del Imco, Manuel Molano, detalló que para el Índice de Competitividad Estatal (ICE) 2020, a diferencia de ediciones pasadas, no se desarrolló un ranking general, “en su lugar se buscó reconocer el buen desempeño de los estados en distintas dimensiones de competitividad, mediante la asignación de medallas (de oro, plata y bronce).”
“La competitividad de los estados es la capacidad para forjar, atraer y retener talento e inversión; además si una entidad muestra mayor competitividad más fácil podrá recuperarse de eventos catastróficos, como una epidemia o un sismo”, dijo.
“Realmente es muy difícil prever lo que va a pasar, hay eventos que ocurren cada 10 años, cada 100 años, pero sí podemos prevenir para que los efectos como pandemias, terremotos, fenómenos sociales, no necesariamente afecten tanto la cotidianidad de los ciudadanos y la competitividad del país”, ahondó.
“Los estados más competitivos están más preparados y se adaptarán mejor ante esta crisis. Hoy los mexicanos queremos tener la certeza de que los gobiernos hacen todo lo que está en su poder para minimizar los efectos de la contingencia y acelerar la recuperación económica”, sostuvo.
En este contexto, el ICE revisa y mide la información de las 32 entidades mediante 10 subíndices (derecho, medio ambiente, sociedad, sistema político, gobiernos, mercado de factores, economía, precursores, relaciones internacionales e innovación), mediante 97 indicadores. La asignación de medallas a los estados se da en cada subíndice analizado, para resaltar si están efectuando buenas prácticas.
Así, sólo 16 de las 32 entidades ganaron alguna medalla: Aguascalientes, Baja California, Baja California Sur, Campeche, Chihuahua, Ciudad de México, Coahuila, Colima, Jalisco, Morelos, Nayarit, Nuevo León, Querétaro, Quintana Roo, Sinaloa y Yucatán.
De éstas, cinco concentran el total de medallas de oro: Ciudad de México, Querétaro, Chihuahua, Colima y Yucatán.
Los mejores
Precisamente, la capital del país fue la entidad que más medallas de oro logró ganar (con cuatro subíndices) y también fue la que mayor cantidad insignias obtuvo (en total fueron cinco).
La primera medalla de oro fue en medio ambiente debido a que cuenta con el mayor número de empresas certificadas como limpias y usa sólo un tercio de la energía que emplea; el segundo oro fue en sociedad, ya que muestra fortalezas en el sector educativo, concentra la mayoría de los recursos de salud y tiene la mayor inclusión de mujeres en el mercado laboral.
La tercera medalla de oro para la Ciudad de México fue en economía, al ostentar con la mayor diversificación sectorial, con la economía más diversificada, generar la mayor proporción de su PIB en sectores de alto crecimiento y registrar el mayor PIB per cápita.
Y el cuarto oro se dio en el subíndice de precursores, pues posee la mayor penetración de servicios financieros, es la segunda entidad con mayor disponibilidad de cajeros automáticos y la tercera con mayor flujo de pasajeros aéreos.
Mientras Querétaro fue la segunda entidad con la mayor cantidad de insignias y medallas de oro (con tres). Este primer lugar lo logró por tener el mejor aprovechamiento de los medios electrónicos para interactuar con los ciudadanos y es la segunda entidad en la que es más fácil registrar una propiedad (subíndice de gobiernos).
Así como por ser el estado más atractivo para la población foránea con educación superior y el segundo con menor desigualdad salarial (mercado de factores) y por contar con la mayor solicitud de patentes, ser el segundo con más empresas e instituciones científicas y tecnológicas y ser el tercero con el mayor número de miembros del Sistema Nacional de Investigadores (innovación).
Más medallas
Otras entidades federativas con medalla de oro fueron Yucatán, en derecho, por contar con la menor tasa de homicidios y el mayor porcentaje de la población que se siente segura en su entidad; Colima, en sistema político, por tener la menor incidencia de corrupción y reconocer en su legislación el matrimonio igualitario, y Chihuahua, en relaciones internacionales, por registrar la mayor exportación de mercancías como porcentaje de su PIB y ser la quinta entidad con mayor inversión extranjera.
Además, ocho entidades del territorio nacional concentraron el total de medallas de plata: Aguascalientes, Campeche, Ciudad de México, Nuevo León, Baja California Sur, Coahuila, Quintana Roo y Sinaloa.
Mientras otros ocho estados lograron ganar medallas de bronce: Nuevo León, Jalisco, Aguascalientes, Baja California, Baja California Sur, Coahuila, Morelos y Nayarit.
Muro de la vergüenza
Manuel Molano dio a conocer cuáles son los estados que no ganaron medallas, “que no están al nivel de competencia de los demás” y que por lo mismo, en algunos casos podrían enfrentar dificultades para superar la pandemia.
“Son Chiapas, Durango, Guanajuato, Guerrero, Hidalgo, Estado de México, Michoacán, Oaxaca, Puebla, San Luis Potosí, Sonora, Tabasco, Tamaulipas, Tlaxcala, Veracruz y Zacatecas”, expuso.
Cinco ejes
El director general del Imco indicó que son cinco ejes los que deben trabajar todas las entidades si quieren superar la pandemia: recuperar sus responsabilidades fiscales, lo que involucra replantear el pacto fiscal; tomar el control de la seguridad pública; innovar en el sector salud, al aumentar la cobertura y la calidad con menores costos; incrementar la oferta educativa pública y privada, y estimular la libre competencia y eliminar las prácticas de extorsión.
Señaló que también se debe aumentar la recaudación local, para dejar atrás la dependencia en las participaciones federales, y a la par, añadió, se debe contar con un marco regulatorio claro y transparente que brinde certeza para la generación de inversión y creación de empresas, “para ello se deben generar herramientas electrónicas”.
Fuente: El Economista