Desde hace meses y tal vez años, gran parte de los inversionistas están esperando el aterrizaje de la economía en EU. Desde que comenzó la escalada alcista en las tasas de interés en aquel país, parece que se ha convertido en una especie de lotería, encontrar la fecha y el momento en el que la Reserva Federal de EU anuncie la reducción de tasas.
Esta semana es buena para mantenerse entretenidos con este melate financiero ante la escasez de información relevante. Con un índice de tendencias de empleo por aquí y unas declaraciones de los presidentes de la Fed por allá; la semana pinta para tratar de atinarle a los números exactos del premio que ya están esperando en Wall Street.
Ayer lunes las acciones estadounidenses cerraron con ganancias. El Promedio Industrial Dow Jones subió 0.5%, registrando su cuarta ganancia diaria consecutiva. El S&P 500 subió 1%, su tercera ganancia diaria consecutiva pero ya lleva un crecimiento de 3.2% en las últimas tres jornadas.
Pero, ¿qué hay detrás de esta aparente bonanza en los mercados? Parece que el informe de empleo de abril, revelado la semana pasada, ha sido el factor clave. Este informe mostró que la economía estadounidense creó menos puestos de trabajo de lo esperado, acompañado de un aumento en la tasa de desempleo y un crecimiento salarial menor al anticipado.
Si bien estos datos podrían considerarse negativos en otros contextos, para los inversionistas han sido un bálsamo. Han aliviado los temores de una economía sobrecalentada y renovando la esperanza de un recorte en las tasas de interés por parte de la Reserva Federal en los próximos meses.
Sin embargo, hay más que números en esta historia. Los indicadores del mercado laboral también nos revelan una disminución en el número de puestos vacantes ofrecidos por las empresas estadounidenses. También se ve una reducción en el número de trabajadores que renuncian a sus empleos para buscar oportunidades en otras empresas. Además, aunque los salarios siguen en aumento, el ritmo de crecimiento se está desacelerando, lo que sugiere que el mercado laboral se está equilibrando.
Entonces, ¿qué significa este «equilibrio» en el mercado laboral? Según los expertos, sugiere que la economía se está enfriando, aunque de manera ordenada y controlada. Esto, a su vez, plantea la pregunta: ¿estamos ante un aterrizaje suave de la economía estadounidense? Es posible, pero aún es demasiado pronto para cantar victoria.
Aunque la Reserva Federal aún no ha dado señales claras de un cambio en su política monetaria, los datos del mercado laboral podrían allanar el camino hacia un recorte de tasas en el futuro cercano. La incertidumbre reina, el melate financiero sigue vivo y los jugadores siguen apostando. Todo mundo espera que la suerte esté de su lado esperando llegue el ansiado aterrizaje suave.