El Ford Mustang Mach-E es la novedad más importante del fabricante de las últimas décadas. Tras unas primeras propuestas tímidas de coches eléctricos, como el anterior Ford Focus, este SUV debe permitirle entrar en el segmento de los eléctricos con fuerza.
Sin embargo, antes de su comercialización, Ford ya se ha encontrado con un primer escollo. Las cifras preliminares de homologación de su consumo y autonomía por parte del organismo competente estadounidense, la EPA, no son los que Ford esperaba. Se queda hasta 30 km menos de lo esperado.
Los documentos con las primeras estimaciones realizados por la EPA de cara a su homologación fueron publicados en la red el pasado lunes, gracias a un miembro del foro Mach-E. Muestran que el SUV eléctrico con la batería más grande disponible (de 98,8 kWh), el Mustang Mach E Long Range y tracción trasera, podría recorrer un máximo de 288 millas (463 km).
La versión con tracción integral vería su autonomía bajar hasta las 250 millas (402 km). Ford tiene como objetivo lograr al menos una autonomía de 300 millas (483 km) con el tracción trasera y 270 millas con el tracción integral (434 km).
Son datos preliminares y Ford confía en lograr su objetivo
En Ford, recuerdan que estos primeros datos se han logrado con un prototipo y por tanto todavía están a tiempo de lograr una puesta a punto para el modelo de serie que les permita alcanzar las cifras de autonomía que esperan.
«Esperamos que las estimaciones de autonomía homologadas por la EPA para el Mustang Mach-E cumplan los objetivos que nos hemos fijado. Tendremos más [información] para compartir a finales de este mes”, asegura la marca en su comunicado.
De hecho, las pruebas de homologación finales podrían arrojar un resultado muy diferente, ya sea peor o mejor, y lo que se ha publicado no son ni los datos definitivos ni los datos oficiales. Eso sí, los datos publicados el lunes nos dan una idea de cómo podría ser al final.
Aunque no sea lo que esperaba Ford, estas pruebas preliminares no son tan catastróficas en el caso del tracción trasera, hay un déficit inferior al 5 %, y algo más preocupante en el caso del tracción integral, con casi un 10 % de diferencia entre lo obtenido y lo que espera Ford.
De todos modos, y aunque los datos que homologa la EPA suelen ser los más cercanos a la realidad (es un poco más estricta que nuestro ciclo WLTP), a nivel práctico debemos recordar que la autonomía de un coche varía según el estilo de conducción, la temperatura ambiente y otros factores, como el uso o no de la climatización. Los conductores pueden finalmente ver una autonomía más alta o más baja que lo que indica la homologación.
Fuente: Motorpasión