Una de las banderas principales de la administración del Presidente López Obrador en sus inicios, fue el combate al huachicoleo, actividad que además de ilícita es sumamente peligrosa para quien la práctica y quienes se encuentran alrededor. El ejemplo de la tragedia de Tlahuelilpan en 2019, donde más de 100 personas murieron calcinadas debiera bastar para ilustrar lo peligroso de esta práctica que se castiga con cárcel.
La sustracción ilegal de combustible no solamente se da en los ductos o a gran escala; esta actividad también es cotidiana para los que se dedican al transporte de carga, pero aquí las empresas juegan un papel fundamental en la detección e interrupción del huachicoleo en menor escala, aunque significativamente importante, recordemos que el estado pierde 60 mil millones de pesos al año por esta actividad criminal.
Un ejemplo claro del combate al huachicoleo, lo acaba de poner la empresa de la industria química, EIQSA, quienes en el monitoreo del uso de combustible a través de las rutas, cargas y kilometraje, detectaron que uno de sus trabajadores que manejaba uno de los camiones de la empresa cometía este delito, con el agravante de que dicho empleado además fungía como líder sindical.
La empresa decidió poner fin a la relación laboral con Víctor Manuel Torres Sánchez pues “contradecía gravemente los valores de la compañía” como expresó un portavoz de la empresa ubicada en el Estado de México.
Fuentes cercanas a la empresa, nos informan que la misma ha recibido una serie de videos donde se observa claramente al extrabajador, Víctor Manuel Torres robando el combustible y vendiéndolo a personas no identificadas.
¿Ustedes creen que esta sea una ruta viable para combatir el huachicoleo?
Foto de archivo.
