El cableado para autos cobrará mayor relevancia por su importancia para los vehículos eléctricos; en el país se fabrican desde Ciudad Juárez hasta Mérida.
México se ha convertido en el rey de la manufactura de arneses (sistemas de cableado eléctrico de los automóviles) en el Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN), con un valor de producción de 8,000 millones de dólares anuales, que surte a los 17 millones de vehículos fabricados en la región, afirmó Óscar Albín, presidente de la Industria Nacional de Autopartes (INA).
En este sentido, conforme se vaya implementando el Tratado entre México, Estados Unidos, Canadá (T-MEC) —que remplazará al TLCAN en cuanto sea ratificado por Estados Unidos y Canadá— e ingrese mayor tecnología en la fabricación de vehículos, como los híbridos y eléctricos, nuestro país aumentará —en un mediano plazo— hasta 20% la fabricación de autopartes importantes del automóvil, y un ejemplo son los arneses, dijo.
“La oportunidad del T-MEC está en los nuevos vehículos para incorporar un mayor contenido regional, entonces este nuevo tratado en caso de que sea ratificado estará dando frutos en el mediano plazo”, sostuvo Albín en entrevista con El Economista.
El presidente de la INA afirmó orgulloso: “Nosotros (en México) somos los reyes de la fabricación de arneses en el TLCAN, todos los arneses que se requieren para los 17 millones de autos ensamblados en el TLCAN son fabricados en México, por operarios mexicanos. Desde Ciudad Juárez, Chihuahua, hasta Mérida, Yucatán, y en el resto de la República Mexicana hay arneses, no sólo para autos, sino para aviones, electrodomésticos, todo tipo de productos con electricidad y conforme la tecnología se vaya incrementando, serán más complejos y complicados, y también nosotros más favorecidos”. A decir del representante de las empresas de partes y componentes automotrices, “México es el número uno en producción de arneses automotrices, con tendencia a elevarse porque el coche terminará siendo una computadora sobre ruedas y mientras no exista la forma de conducir la electricidad sin cables, lo coches seguirán teniendo arneses”.
El valor de mercado de los arneses oscila en los 8,000 millones de dólares, que es equivalente a más de 10% de lo que exporta actualmente la industria de autopartes, y con la apuesta a elevar su presencia porque los autos eléctricos requieren de arneses de alto voltaje, pues no son de 12 volts, como se fabrican actualmente. “El arnés forma una parte importante del futuro del automóvil”, destacó Albín.
La industria de autopartes en México y la región de Norteamérica es un sector con gran futuro y con la llegada de la inteligencia artificial al automóvil, se tendrán que fabricar partes y componentes dirigidos a la conducción autónoma y la movilidad eléctrica, en donde nuestro país será un gran actor al ser el abastecedor de las autopartes.
En el momento que entre en vigor el T-MEC se comenzarán a implementar algunas obligaciones para los autopartistas en incrementar su contenido regional paulatinamente, y eso atraerá que los nuevos modelos que se traigan a desarrollar se planeen con mayor contenido regional, aseguró.
El presidente de la industria de autopartes, sector que apunta a romper récord en producción durante el 2019 con un valor cercano a los 100,000 millones de dólares, explicó que en México se producen todas las autopartes que tiene un automóvil de defensa a defensa, y “no es que el T-MEC traiga oportunidades para fabricar partes que antes no se fabricaban, todo se fabrica aquí, desde radiadores, motores, bujías, asientos, arneses, llantas, volantes, ejes, vidrios, todo lo eléctrico, con diferentes empresas. Lo que vamos a tener es más de lo que ya se produce”, estableció Óscar Albín.
Fuente: El Economista