La apreciación del peso debe ser vista con cautela, pues los indicadores fundamentales y técnicos señalan una alta probabilidad de rebote en el mediano plazo, de acuerdo con expertos.
“Yo me iría a la historia y generalmente cuando hay un peso fuerte todas las exportaciones se ven afectadas”, afirmó Francisco González Díaz, presidente ejecutivo de la Industria Nacional de Autopartes (INA).
Al cierre de la jornada cambiaria del 11 de enero de 2023, el tipo de cambio cerró en una cotización de 18.9795 por ciento por dólar, con una ganancia de 0.36 por ciento frente al precio de referencia del martes. Así cerraba en su mejor nivel desde finales de febrero de 2020, según Banco de México(Banxico).
“Este miércoles, el peso mexicano rompió récord y llegó a 18.97, para consolidarse como una de las divisas más firmes a nivel internacional”, presumió el gobierno de Andrés Manuel López Obrador.
A la par gobernadores, diputados, senadores y hasta presidentes municipales ligados a Morena y a la Cuarta Transformación dijeron que es una buena noticia el súper peso para la economía mexicana. Pero no explicaron los efectos sobre la industria, empresas y remesas.
El súper peso se convierte en un problema para las empresas exportadoras, porque la pieza A cuesta ahora más y es más cara si viene de México por una conversión del tipo de cambio, a una que venga de otra parte del mundo, agregó el representante de la industria de autopartes.
El sector exportador tiene una competencia mucho mayor de un 5, 10 y 15 por ciento, que cuesta más tu producto: “Entonces está siendo una situación complicada para todo el sector exportador, siendo el sector automotriz —y concretamente autopartes— el que más exporta en México y el que más divisas genera”.
“Es una situación para las exportaciones de tensión, pero somos todavía muy buenos y hay ciertos factores en el mercado mexicano que permiten la absorción y crecimiento del sector autopartes”, manifestó Francisco González Díaz.
Eugenio Salinas Morales, presidente de la Comisión de Comercio Exterior y Asuntos Internacionales de Confederación de Cámaras Industriales (Concamin), afirmó que el sector agroalimentario será otros de los afectados por un súper peso como se cotiza en el cuarto año de gobierno de Andrés Manuel López Obrador.
“Es la misma circunstancia, que la del sector automotriz y autopartes. Ahí no podemos omitir que el mercado internacional es competitivo y ahí jugamos con márgenes de ganancia de entre 2 por ciento y 3 por ciento”, expresó el empresario regiomontano.
Una apreciación del peso en automático te quita la competitividad que tenías vis a vis contra otros países, añadió Salinas Morales.
El súper peso no aumenta equipo y maquinaria de importación, comenta José Ignacio Martínez Cortés, coordinador del Laboratorio de Análisis de Comercio, Economía y Negocios (Lancen).
Durante el cuarto trimestre de 2022, el peso se apreció 3.58 por ciento frente al dólar, pero entre octubre y noviembre las importaciones totales se redujeron 7.04 por ciento y la demanda de equipo y maquinaria de importación disminuyó 1.8 por ciento, recordó.
De igual forma, los bienes de uso intermedio disminuyeron 4.9 por ciento, los bienes de capital bajaron 4.08 por ciento y los bienes de consumo cayeron 10.06 por ciento: “Esto demuestra la débil actividad industrial que en octubre y noviembre aumentó sólo 0.4 por ciento”, declaró el experto.
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“Una consecuencia de la apreciación de la moneda nacional debería ser el aumento de importaciones, lo cual no ocurrió”, manifestó José Ignacio Martínez Cortés.
La apreciación del peso debe ser vista con cautela, pues los indicadores fundamentales y técnicos señalan una alta probabilidad de rebote en el mediano plazo, afirmó Gabriela Siller Pagaza, directora de Análisis económico de Banco Base.
La economista de la institución financiera explicó que es importante tener en cuenta que la apreciación del peso implica ventajas y desventajas para México.
Por lo pronto, “desincentiva las exportaciones, pues se vuelven relativamente más caras para compradores en el extranjero, también desincentiva la inversión extranjera directa, pues se requieren más dólares para la adquisición de capital fijo en el país”, detalló la experta.
Otro de las desventajas de súper peso es la reducción de la cantidad de remesas recibidas al convertirlas a pesos mexicanos: “En 2022 el crecimiento del consumo estuvo respaldado en parte por el crecimiento de las remesas y para 2023 ya se contempla una desaceleración en su flujo en dólares”.
La apreciación del peso implica que la desaceleración de las remesas medidas en pesos será mayor, apuntó Siller Pagaza.
Agregó que las ventajas del súper peso son que ayudan a que la inflación baje, pues ocasionan un abaratamiento de las importaciones.
También aumenta el rendimiento de las inversiones en pesos al convertirlas a dólares, lo que puede fomentar mayores flujos de inversión de cartera, añadió.
“Menor cantidad en pesos por dólar de deuda, lo cual es favorable para empresas que tienen deudas en divisas extranjeras e ingresos en pesos mexicanos”, dijo.
“Para el gobierno es favorable la apreciación del peso, pues los intereses que se pagan para deuda externa son menores al convertirlos a pesos”, concluyó Gabriela Siller Pagaza.