El efecto de relocalización de empresas, conocido como nearshoring, ha significado distintos beneficios a México, desde la rama económica, con inversiones, hasta el dinamismo del sector inmobiliario, en específico de espacios industriales, por lo que se tiene la oportunidad de un crecimiento sólido en este aspecto hacia el futuro.
De acuerdo con Josefina Moisés, Asociación Mexicana de FIBRAs Inmobiliarias (Amefibra), se estima que cerca de 500 empresas gracias al nearshoring, por lo que la oportunidad de crecimiento del ramo inmobiliario industrial está en este tema, así como en el turismo e infraestructura.
«Tenemos una buena mano de obra, pero además la estabilidad macroeconómica, tasas de interés y tipo de cambio estable, permiten a los inversionistas evaluar la relocalización de sus áreas de producción a México, lo que da como resultado que haya una demanda de parques industriales y que se tenga que trabajar en el mejoramiento de la red carretera y de telecomunicaciones, todo esto a fin de brindar grandes beneficios a las empresas extranjeras para que decidan ubicarse en nuestro país», destacó Moisés en un artículo de opinión.
Sin embargo, pese a estas perspectivas positivas, la directora de la Amefibra indicó que hay retos que se deben de superar. Por ejemplo, pese al crecimiento de la oferta de estos espacios, esta sigue comprimida pues la demanda es mucho mayor.
En este escenario, Moisés resaltó que existen condiciones que han significado obstáculos para el desarrollo de nuevos proyectos especulativos, como pueden ser:
- Escasez de energía.
- Incrementos de precio de tierra.
- Encarecimiento general de los insumos de construcción.
- Alza de las tasas de interés.
Números positivos
Moisés puntualizó que actualmente México es un país atractivo para las inversiones extranjeras, prueba de ello son las cifras de la Secretaría de Economía que indican que la Inversión Extranjera Directa al cierre del tercer trimestre del 2023 fue de 32,926 millones de dólares, es decir un incremento anual de 30%, lo que es muestra de la confianza de inversionistas extranjeros por el «buen ambiente de negocios y estabilidad económica del país».
En este escenario, se estima que durante el 2022 la oferta de espacios industriales incrementó para cerrar el año en 3.98 millones de metros cuadrados de inventario, lo que significó un incremento en ese año de 290,000 metros cuadrados.
«El mercado inmobiliario continúa siendo una opción sólida y confiable, capaz de resistir las crisis económicas globales pese a los riesgos inherentes a cualquier inversión. Dicho mercado, es especialmente atractivo gracias a la ubicación estratégica del país y los buenos costos de las propiedades, diversos tipos de industrias, mercado creciente, condiciones comerciales beneficiosas, bajos costos laborales y ahorro de costos, entre otros», apuntó la especialista.
Tendencias hacia el futuro
Actualmente, los Fibras administran más de 2,000 propiedades con más de 35 millones de metros de superficie bruta alquilable, lo que ha dado paso a la creación de 500,000 empleos, de los cuales 450,000 han sido de forma indirecta y 50,000 de manera directa.
En este contexto, la especialista destacó que poco a poco se acentúa el desarrollo de edificios sustentables, esto debido a la necesidad de ahorrar en temas de energía, agua y energía embebida en materiales, logro que se tiene que materializar antes del 2050.