Los tres países, al ser sede de importantes industrias automotrices, podrían ser vulnerables al efecto de aranceles, consideró el IIF.
La industria automotriz en México, Eslovaquia y la República Checa son vulnerables a la guerra comercial entre Estados Unidos y China, advirtió el Instituto de Finanzas Internacionales (IIF, las siglas en inglés), que agrupa a más de 500 instituciones financieras de 70 países.
Con China y Estados Unidos en el centro de las cadenas de suministro global y logística, las exportaciones de países que transitan por estos mercados pueden terminar sujetas a aranceles, especialmente las del sector automotriz.
“Eslovaquia, la República Checa y México son buenos ejemplos de esta dinámica, sus economías son especialmente vulnerables a los aranceles en serie debido a su posición en las cadenas de suministro mundial, ya que cada una es hogar de importantes industrias automotrices de ensamblaje”, dijo Sonja Gibbs, directora senior del IIF.
Agregó que las repercusiones no son insignificantes, pues con hasta 25 por ciento de las exportaciones en cualquier dirección sujetas a los aranceles bilaterales de EU y China, podrían agravar las consecuencias directas de la “guerra automotriz” entre EU y sus socios comerciales.
El IIF estimó que en México, 17 por ciento de las exportaciones están sujetas a los aranceles chinos sobre importaciones desde EU y 20 por ciento de las exportaciones se someterán a los aranceles estadounidenses de productos de China.
Por su parte, Christian Keller, economista de Barclays, destacó que los aranceles y otros costos de comercio crean efectos en cascada.
“En un mundo moderno de cadenas de valor globales, gran parte del comercio es importaciones y reexportaciones de bienes intermedios a medida que pasan por los nodos de procesamiento antes de llegar a los consumidores finales”, expuso el especialista.