- Fundamento para la captación de inversión extranjera
- Empresas logísticas se instalan en ellos para ganar eficiencia
Por Joaquín Vázquez M.
Estar dotados de factores que abonen a favor de la logística de las empresas que los habitan para llevar sus productos a los mercados internos y externos con oportunidad y en condiciones óptimas es un requerimiento indispensable que los parques industriales mexicanos proporcionan a los propietarios y arrendadores de sus instalaciones.
De acuerdo con un reporte de la Asociación Mexicana de Parques Industriales Privados las empresas globales de manufactura y distribución son las que ocupan principalmente esos espacios. Corporaciones automotrices, químicas, de plásticos, fabricantes de componentes para aviones, de alimentos y bebidas, entre otros de primer orden, demandan tener acceso rápido a los mercados y a las plataformas logísticas del territorio nacional y de allí la relevancia de la ubicación geográfica, de tener costos competitivos, acceso a mano de obra especializada y de técnicos, además de infraestructura de servicios de clase mundial.
La proporción de inversión extranjera directa en los 250 inmuebles manufactureros miembros de la AMPIP –ecuación que seguramente estará replicada en los otros 300 conjuntos de manufactura de esta clasificación existentes en el país—la encabezan los Estados Unidos con 935 empresas que representan el 38% de las 2,286 empresas inquilinas.
En segundo lugar son empresas mexicanas que significan el 30% y las 785 restantes, el 32%, provienen de Japón, Alemania, Corea del Sur, Canadá, Francia, España, Italia, Reino Unido, entre otras naciones.
La prioridad de ubicuidad de estos conjuntos fabriles es el acceso próximo a vialidades rápidas, preferentemente a los ejes troncales carreteros, autopistas de cuota de cuando menos cuatro carriles, también al sistema ferroviario, a recintos fiscales estratégicos para la gestión aduanal y la rápida conexión con puertos marítimos y aeropuertos para embarcar sus productos con rapidez y seguridad. Igualmente para recibir materias primas e insumos de su cadena de valor de producto.
En el caso de la carga a destinos nacionales, tener la conectividad para afrontar todas las variables que pudieran presentarse entre la planta o el almacén de salida con los centros de distribución para el mercado interno. Algunas ramas industriales, puntualmente la industria automotriz mantienen cadenas de ensamble en sus plantas de “justo a tiempo” y “justo en secuencia”, de manera que el transporte con partes, componentes o accesorios de los vehículos debe de tomar su lugar en el momento y el turno precisos. No hacerlo así implica una penalización que incrementa los costos e incluso dejar de ser proveedor.
El especialista de servicios logísticos calcula una cobertura que arranca en la bodega de la planta hasta el destino final o en su caso a los puertos de embarque o desembarque. Resulta obvio que la infraestructura de los parques industriales, con vialidades amplias, andenes de carga, maquinaria para el dinámico empaque y embalaje son más eficientes que las industrias incrustadas en zonas de tránsito pesado y que no tienen un diseño arquitectónico creado para la producción y distribución en grandes volúmenes.
Selecciona el o los modos de transporte a utilizar –en México el sistema ferroviario es sumamente limitado y la carga es movilizada prioritariamente por el autotransporte, lo que encarece los costos además de que prácticamente no hay cabotaje marítimo–, las rutas, costos, tiempos de itinerario y de gestión aduanal son valores logísticos.
La diversidad de incidencias que pueden ocurrir para trasladar productos perecederos o no perecederos como por ejemplo de las granjas camaroneras de Nayarit al polo turístico de Cancún, esto es un itinerario cercano a los dos mil kilómetros, es muy amplia: de orden climático, sísmico y de una diáspora fenómenos naturales que resultan imponderables. Como también los derivados de cuestiones económicas, situaciones políticas o de orden social y de seguridad, toda vez que la toma de vías de comunicación, el bloqueo de vialidades por motivos políticos, la constante reparación de carreteras y desviaciones, aunada a la creciente inseguridad hacia los camiones de carga conforman un voluminoso cuadro de retos para la operación logística en nuestro país
Arrancar o llegar desde/a parques industriales apoya la buena logística de las empresas de manufactura y distribución, lo que los hace contribuir al desarrollo exportador del país y a la recepción de más inversión extranjera directa. Hoy ya muchas empresas del cálculo logístico están instaladas en los parques industriales para estar cerca de los clientes y ganar en eficiencia y rentabilidad de sus negocios.
Fuente: Forbes