Pero el empleo en la industria no cuenta la misma historia. Desde finales de 2022 el crecimiento del personal ocupado se ha estancado, y en el último mes del 2023 hubo un descenso del 0.4%. La gran caída de contrataciones en el sector llegó luego de la aplicación de la reforma del outsourcing, que hizo que la industria tuviera a 656,800 personas en la plantilla laboral a 469,762 en mayo de 2020, el punto más bajo.
En 2023, la cifra ha oscilado entre 54,000 y 57,000. En diciembre, el número de las y los obreros creció 0.3% y el de posiciones administrativas, contables y de dirección retrocedió 0.4%. Al mismo tiempo las horas trabajadas disminuyeron 1% y la remuneraciones medias reales incrementaron 0.8%, mostrando una tendencia a la alza desde inicios de 2020.
Trenes, carreteras y naves industriales
El 2023 tuvo sus actividades estrella en valor de producción. Los sectores que más aportaron al crecimiento de los indicadores fueron la edificación, con 39.2% del total y la construcción de obras de ingeniería civil con 50.3%
De manera más específica, el primer segmento fue reforzado por 20.8% de obras de edificios industriales, comerciales y de servicios, así como 15.5% de vivienda, actividades seguidas por la construcción de obras ferroviarias, una de las prioridades de la actual administración, que aportaron 14.9% y la edificación de carreteras, caminos y puentes, con 10.2%.
En la comparación anual, el sector que más creció en valor de producción fue el de transporte y urbanización, con 130.3% más en 2023 respecto a 2022, y la electricidad y telecomunicaciones, que a pesar de no haber tenido un cierre protagónico en diciembre, tuvo un desarrollo de 64.4%.