-Es uno de los principales operadores del PRI en el estado.
-Entre sus principales conexiones políticas destacan los ilustres exgobernadores Manlio Fabio Beltrones y Guillermo Padres.
El actual Secretario General de la Confederación de Trabajadores de México (CTM) en Sonora ha sido pieza fundamental en el deterioro industrial del estado, lleva varios años activo en la vida sindical y política de Sonora. Ha buscado la titularidad de sindicatos relevantes de la región. En esta incesante búsqueda de saciar su hambre de poder, logró dividir al anterior sindicato nacional de FORD. Aparentemente su intervención fue tan grave que ayer Expreso publicó una nota destacando que la planta de Ford produjo en Julio la cifra más baja en 16 años, si bien su participación en este hecho pudo no ser directa, es evidente que sus acciones de desestabilización ya están repercutiendo seriamente en la productividad de las empresas avecindadas en Sonora.
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Sus malas prácticas ya han comenzado a tener efectos negativos incluso para él mismo, pues en días pasados se supo que sufrió un revés con la pérdida del recuento por demanda de titularidad del Contrato Colectivo de Trabajo de la empresa proveedora de FORD, Martinrea, el 28 de junio del 2022.
Es claro que sus objetivos están el bienestar de los trabajadores bandera con la que se vende, únicamente busca beneficio personal, sin importar las consecuencias que esto pueda traer, no nos extrañe en lo más mínimo que Ford comience a recortar personal y después aparezca Villarreal Gámez, a venderse como el salvador de los trabajadores despedidos, pretendiendo que se olvide que, derivado de sus acciones fue que se perdieron esos empleos.
Javier Villarreal Gámez es un cáncer que se debe extirpar del estado, antes de que haga metástasis y convierta a Sonora y su poderío industrial en un enfermo terminal.
