Ébano, San Luis Potosí, 8 de octubre de 2020.- Derivado de la crisis económica que atraviesa nuestro país a partir de la llegada del COVID-19, muchas empresas y negocios se han orillado a cerrar sus puertas definitivamente. A inicios de junio de este año, la Alianza Mexicana de la Organización de Transportistas (AMOTAC), anunció que más de 38 empresas del sector transporte cerraron, dejando a más de 320 familias de San Luis Potosí sin sustento y este es solo el ejemplo de como se ha deteriorado el panorama económico desde el inicio de 2020.
Por esto resulta llamativo que otras empresas como Uniformes San Luis, que desde hace más de 20 años ha sido detonador del crecimiento y empleo en la región, sea objeto de protestas por supuestos despidos injustificados llevados a cabo en septiembre, cuando esta empresa se caracterizó por cubrir los salarios y prestaciones integras en los meses de marzo a agosto, a pesar de que su operación estuvo cerrada.
“La empresa ha actuado conforme a lo que marca la Ley, siempre ha respetado los derechos de los compañeros y sabemos que por desgracia a algunos se les dio las gracias pero fue conforme a la ley, tanto por el asunto de la pancemia como por la sana distancia, en mi caso agradezco seguir trabajando y por eso le echamos más ganas porque de aquí está el sustento de nuestras familias”, apunto, José Luis Franco trabajador de Uniformes de San Luis.
Recordemos que esta empresa radicada en Ébano es uno de los centros de trabajo con más alta reputación en el estado y se pueden encontrar en sitios especializados en la búsqueda laboral, son decenas de trabajadores que señalan un ambiente de tolerancia, inclusión y respeto entre colaboradores.
Uniformes San Luis obedece mantiene una estrategia comercial y se espera que, en próximos meses la situaciñon mejore, volver a tener la plantilla laboral completa, ya que; esta empresa es un ejemplo de que las exportaciones son una ventaja competitiva que garantiza además de la calidad, reforzar un mercado laboral que en este momento se encuentra en desventaja por la crisis económica y la emergancia sanitaria.
Fuente: Redacción