Entre las oportunidades y alternativas que la consultora latinoamericana Kolibri identifica para reducir el impacto ambiental y social de esta industria, y ser así más regenerativa con el planeta, se encuentran los «Modelos de acceso»
De acuerdo con datos de la consultora latinoamericana Kolibri, la industria textil-confección en México es una de las más relevantes. Representa el 10% del PIB del sector manufacturero, lo que coloca al país como el quinto proveedor global. A pesar de esta relevancia, también genera grandes impactos negativos a la naturaleza: los principales se generan durante los procesos de blanqueado del algodón, durante el que se puede llegar a contaminar los entornos acuáticos y terrestres, así como causar eutrofización, lo que puede derivar en pérdida de la calidad del agua; además del mismo proceso con el hilado, donde se dan grandes desperdicios de materia prima y sólo el 38% del cultivo se puede aprovechar.
En contraparte, la consultora especializada en estrategias ambientales destaca algunas de las acciones alternativas que ya se realizan en el país en cuanto a la moda. Por ejemplo, en muchas zonas rurales las tiendas de segunda mano son más comunes que las que comercializan ropa nueva. También se trabaja con materias primas innovadoras, tales como la piel de nopal y el henequén, con las que se producen cuero vegetal y fibra blanca.
“En la región, México es uno de los países más importantes de la industria textil por el impacto económico que genera y la fuente de trabajos que ofrece. Sin embargo, es importante que se trabaje para lograr un modelo ambiental regenerativo y socialmente justo para cada uno de los actores de esta industria”, señala Federico Gómez Guisoli, director ejecutivo de Kolibri.
En este sentido en entrevista con Mateo Saavedra, director de estrategias de Kolibri, el factor de sustentabilidad es uno de los más importantes que deben considerar las empresas hoy en día.
«Vemos en México un país extremadamente interesante con muchos desafíos pero también muchas oportunidades, si bien operamos en toda latinoamérica tenemos una misión muy clara de impulsar a América Latina como líder ambiental en el mundo. Y México tiene la capacidad de ser líder en materia ambiental. Las empresas en sí mismas empiezan a considerar el medio ambiente como una variable», enfatizó.
Entre las oportunidades y alternativas que Kolibri identifica para reducir el impacto ambiental y social de esta industria, y ser así más regenerativa con el planeta, se encuentran los «Modelos de acceso», que tienen como objetivo que las personas tengan acceso a la indumentaria y que pueden implementarse como modelos de suscripción, alquiler a corto plazo, venta de prendas durables y reventa de prendas reparadas o reacondicionadas.
Así como los «Modelos de recolección» a nivel municipal, diferenciada, a domicilio, devolución a marcas por correo, devolución en las tiendas, donación a organizaciones, etc.
“A pesar de satisfacer una de las necesidades más básicas, la vestimenta, la industria textil está lejos de ser sustentable: tan sólo el 1% del total de textil que se produce mundialmente es reciclado, un número bajísimo si consideramos que hoy en día se fabrica el doble de prendas que hace 15 años”, comentó el directivo.