Por el mal manejo como directora de la Brigada de Vigilancia Animal, Lety Varela pierde simpatizantes

Gracias a su mal manejo como directora de la Brigada de Vigilancia Animal, Lety Varela tiene una mancha muy grande en su expediente y las personas se cuestionan de los valores que posee la candidata, así como su forma de gobernar. 

Leticia Varela, quien actualmente busca la alcaldía de Benito Juárez, enfrenta un pasado turbulento marcado por una serie de denuncias ciudadanas y controversias que comprometen seriamente su candidatura. Durante su periodo como directora de la Brigada de Vigilancia Animal (BVA) de la Ciudad de México, Varela acumuló una notable cantidad de críticas y cuestionamientos que han resurgido en el contexto de su campaña actual.

En octubre de 2021, una petición en el portal change.org, que rápidamente ganó atracción, instaba a la entonces Jefa de Gobierno, Claudia Sheinbaum, a reconsiderar el nombramiento de Varela al frente de la BVA. El argumento central de la petición era que, basándose en su historial como diputada local, Varela había realizado acciones que perjudicaron al gremio veterinario y a los sectores relacionados con el cuidado de los animales. Esto ponía en duda su idoneidad para un puesto que, según la solicitud, requería conocimientos técnicos y científicos específicos, así como una competencia profesional demostrable en el área, cualidades que Varela aparentemente no poseía.

Además, en diciembre de ese mismo año, otra petición de change.org acusó a Varela de corrupción, negligencia y abuso de autoridad durante su gestión en la BVA. Estas acusaciones pintan un cuadro de una administración deficiente y potencialmente corrupta bajo su liderazgo, complicando aún más su perfil público y su campaña electoral.

Estas denuncias no solo afectan la percepción de su competencia y ética profesional, sino que también plantean serias preguntas sobre su capacidad para ocupar un cargo de mayor responsabilidad como lo es la alcaldía de Benito Juárez. Los votantes podrían considerar su historial como un indicativo de lo que podrían esperar de su administración si fuera elegida.

Con el peso de estas controversias a cuestas, la candidatura de Leticia Varela se enfrenta a un escenario electoral complicado, donde los votantes están cada vez más informados y menos dispuestos a pasar por alto antecedentes problemáticos y más cuando se habla del bienestar en los animales. En un ambiente político que cada vez valora más la transparencia y la integridad, las sombras del pasado de Varela podrían ser un lastre demasiado pesado para su ambición política.